El ingenio de las mafias que se dedican a la fabricación de pirotécnicos no tiene límites. Resulta que para captar a los menores, estas ilícitas organizaciones ofrecen regalos verdaderamente letales: Colocan los citados objetos explosivos junto a las envolturas de ricas golosinas.

De esta manera, captan a los más pequeños, quienes llevados por su inocencia pueden llegar a tener en sus manos peligrosas sustancias que podrían causarles la muerte.

Un reciente operativo de la Unidad de Desactivación de Explosivos (Udex) permitió incautar dulces de kiwicha, en envolturas similares a los conocidos “chizitos”, que tenían pegadas un empaque con algún pirotécnico.

En uno de éstos se puede apreciar claramente la mecha del peligroso producto, cuya procedencia se desconoce. “Es lo que llamamos un exceso de los fabricantes de pirotécnicos, es una nueva forma de engañar a los niños y poner en riesgo sus vidas”, señaló el jefe de la Udex, Gustavo Medina.

Este tipo de “golosinas” son ofrecidas en diferentes mercados clandestinos, por lo que los agentes especializados han intensificado las operaciones, principalmente en el Cercado y La Victoria, según informó ‘Correo’.

Los más peligrosos

Medina informó que entre los productos más peligrosos figuran los conocidos “ratablancas”, “mamaratas”, “chapanas”, “cohetones”, “rascapiés”, “avellanas” y los “silbadores”.