Raúl García Albornoz, propietario del centro Cristo es Amor (en donde fallecieron 27 personas a causa de un incendio), quien se encontraba como no habido, se entregó a la Policía en el transcurso de la tarde en compañia de dos abogados.

Según informó Punto Final, García, quien rindió su manifestación en la sede de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), sería culpado por homicidio doloso.

Cabe recordar que el sujeto era buscado intensamente por la Policía, ya que se le acusa de haber provocado la muerte de los 27 internos al impedirles la salida del albergue informal ubicado en el distrito de San Juan de Lurigancho.