El expresidente Alberto Fujimori abandonó el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), en Surquillo, para ser recluido nuevamente en la DIROES de la Policía, en Ate Vitarte, donde cumple una condena de 25 años prisión.

Las decenas de periodistas, que aguardaban la salida de Fujimori en una ambulancia del INPE, se dieron con la sorpresa que el exmandatario no salió por la puerta principal ubicada en la avenida Angamos.

La salida del exjefe de Estado se dio por una puerta posterior y bajo fuerte medidas de seguridad. Antes su hija Keiko Fujimori lo visitó y el INEN informó que Fujimori padece un cuadro de depresión.