No serían tan buenos y correctivos como parecen, al menos así lo indican los dueños de los night clubs intervenidos, quienes denunciaron que los ronderos de Cajamarca les roban dinero durante sus operativos.

Uno de los presuntos afectados contó que desde hace tiempo “viven una dictadura de los ronderos”.

Sin embargo, ellos no son los únicos que se quejan de estos “justicieros”, pues una de las damas de compañía los denunció por agresiones, después que fuera azotada a latigazos.

Pese a esto, las rondas aseguraron que continuarán con su labor sin importarles las denuncias en su contra.


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