El expresidente de la Conferencia Episcopal Peruana Luis Bambarén planteó la reapertura del penal El Sepa, ubicado en una inhóspita zona selvática, como una medida necesaria para enfrentar y sancionar con firmeza a la delincuencia.

También se pronunció a favor de la eliminación de los beneficios penitenciarios para los delincuentes reincidentes. Pidió, además, que el Poder Judicial aplique “todo el peso de la ley” a los delincuentes y así evitar que continúen burlándose de la justicia.

“Hace años estuve una semana en El Sepa; desconozco por qué lo cerraron, era un sitio de trabajo en la selva, y creo que para descongestionar las cárceles debe reabrirse”, dijo a la Agencia Andina.

El Sepa fue creado en 1951 y estuvo orientado a resocializar a sentenciados por delitos agravados.