Fidela Vásquez, madre del militar Luis Astuquillca, nunca dejó de rezar para que su hijo apareciera con vida luego que participara en la operación para rescatar a los trabajadores de Camisea, en Cusco.

Al enterarse que Luis sobrevivió 17 días perdido en la selva y que llegó por sus propios medios a Kiteni, Fidela no dejaba de contar las horas para abrazar nuevamente a su hijo.

Eso momento se dio cuando lo vio descender de la avioneta de la Policía en la DIPA, Callao. Tanto madre e hijo se abrazaron fuertemente y derramaron alguna lágrimas de la emoción.