“No quisiera que nadie pase lo que yo pasé por la negligencia de esta empresa”, dijo Katiuska Quesada, una de las cinco sobrevivientes de la caída de un globo aerostático al mar de Cañete.

Quesada contó cómo ella y las cuatro mujeres lograron sobrevivir al naufragio. “Antes de subir le pregunté al piloto por el gas, el me dijo que tenía para tres horas. Yo calculé el tiempo y cuando pasó le volví a preguntar. Él se quedó callado”, señaló.

“Es en ese momento que entendí que algo estaba mal, al rato, el piloto nos dice que debemos saltar. Así lo hicimos. Yo fui la última y antes de saltar escuché que dijo que no sabía nadar”, detalló.

Sobre Aldo Torres, el último pasajero que fue hallado muerto, comentó que cuando todos se lanzaron al mar estaban juntos, pero con el pasar de las horas, él se alejó del grupo.