Hernán Ospina, acusado de realizar un disparo en medio de una fiesta infantil que se realizaba en el local de comida rápida KFC en San Juan de Lurigancho (SJL), explicó en su declaración a la Policía Nacional por qué lo hizo.

Todo se habría iniciado entre la pelea de dos niños, uno de los cuales es el hijo del detenido. “Mi hijo estaba corriendo cuando se apareció una niña de aproximadamente 10 años y lo empujó hacia la pared. Como mi hijo se puso a llorar, mi esposa lo trajo hasta la mesa, al revisar su rostro nos dimos cuenta que a la altura del pómulo estaba morado por el golpe”, indicó Ospina.

Esto motivó que Ospina fuera a reclamarle a los padres de la niña pero terminaron liándose a golpes. “El padre de la niña me retó para ir afuera, yo también me alteré y le dije “vamos”. Yo veo que la madre de la niña se le abalanzó a mi conviviente, yo pongo el brazo para separarlos y en eso el padre de la niña empezó a atacarme. Nos agredimos mutuamente”, testimonió.

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“Siento un forcejeo en el bolsillo donde estaba mi pistola, yo me safo, doy un paso atrás y realizó un disparo con mi arma de fuego”, indicó en declaraciones reproducidas por América Noticias.

Sin embargo, José Antonio Toribio Jaramillo, el padre de la niña que agredió al menor, sostuvo que Ospina lo persiguió por más de cinco minutos por el segundo piso del establecimiento apuntándolo con el arma.

Ospina tiene licencia para portar arma de fuego pero esto no lo exime de la irresponsable acción que cometió en medio de una fiesta que reunía a numerosos niños. Ahora afrontará el delito de exposición de personas al peligro.

Fuente: América Noticias