El arzobispo de Lima, cardenal Juan Luis Cipriani, presidió una solemne misa por Domingo de Ramos en la Basílica Catedral de Lima, dando inicio a las festividades por Semana Santa.
Desde las 10:30, el primado de la Iglesia Católica bendijo los ramos que llevaron los fieles, elaborados con palma de olivo, para luego dar inicio a la santa misa.
Durante la homilía, Cipriani instó la población a dejar la puerta abierta a Jesús para que ingrese a nuestros corazones, no solo leyendo la Biblia sino cumpliendo los sacramentos.
Sostuvo que el transcurso de la vida vamos a encostarnos con traiciones y ataques, pero que eso no debe preocuparnos porque siempre vamos a tener a Jesús para que nos oriente
Pidió trabajar mucho en el tema del rezo como una forma de acercarnos a Cristo
“Hay que ser valientes, no hay que tenerles miedo ni a los problemas ni a los ataques”, manifestó Cipriani