La sordera es una de las cuatro discapacidades más frecuentes entre los peruanos y para prevenirla es necesario someterse a evaluaciones audiológicas, especialmente quienes están expuestos permanentemente a fuertes ruidos.

En marco al Día de la Discapacidad, la fonoaudióloga Janet Valdivieso advirtió que la pérdida auditiva puede presentarse en cualquier momento de la vida y afectar seriamente los procesos de aprendizaje y socialización de quienes la padecen.

Valdivieso, de Tecnología Auditiva Americana, recordó que según cifras del INEI en el 2006 en Perú existían alrededor de 60,000 jóvenes entre 18 y 24 años con algún tipo de discapacidad y que el 16 por ciento de ellos padecía sordera y/o mudez.

Explicó que la prevención de la discapacidad auditiva requiere de cuidados diarios muy sencillos y que la primera medida es no introducir en el oído hisopos o cualquier otro objeto, así como evitar que niños muy pequeños estén expuestos a ruidos o sonidos altos (superiores a 90 decibeles).

También aconsejó no usar auriculares por tiempo prolongado, alejarse de los parlantes de los equipos de sonido y finalmente buscar una evaluación profesional cuando notamos que nosotros u otro miembro de la familia requiere que se le hable en voz alta.

Por último, la especialista recomendó a las personas mayores de 60 años y a quienes están expuestos permanentemente a ruidos o sonidos altos someterse periódicamente a una evaluación audiológica en un centro que les garantice los cuatro exámenes fundamentales.