Javier Ochoa y Antonio Mamaní estuvieron secuestrados cerca de un mes en ese país, pero ahora podrán reunirse con sus familiares.

Raúl Salazar, director general de la Policía Nacional, manifestó que ambos están “buenos y sanos” y que ellos decidirán a dónde trasladarse. “Lo importante es que estén junto a sus familiares”, declaró a la prensa.

Por su parte, el cónsul pertuano Renzo Villa señaló que próximamente los peruanos serán sometidos a otros exámenes para conocer si han sufrido algún problema durante su cautiverio.

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