Dos menores de edad que sufrieron quemaduras producto de la explosión de pirotécnicos, uno de los cuales perdió un ojo, reciben atención especializada en el Instituto de Salud del Niño de Breña (ex Hospital del Niño).

El director de dicho nosocomio, Alfonso Tapia Bautista, informó que se trata de una niña de 7 años que llegó desde el Callao la misma Nochebuena y de un niño de 13 años que llegó procedente de Huaral, al norte de Lima.

La menor, de iniciales T.C.A., sufrió quemaduras en sus nalgas a raíz de un pirotécnico que explotó cerca donde ella se encontraba. Sufrió quemaduras de tercer grado y ya ha sido sometida a dos intervenciones quirúrgicas.

“A esta niña le colocarán injerto de piel de cerdo, ya está estable, pero su recuperación le tomará varios meses”, subrayó el director el instituto.

También se refirió al caso del menor de iniciales W.L.S. (13), quien ingresó al hospital debido a que un pirotécnico le dañó uno de sus ojos, el cual, dijo, lo perdió.

“Estamos preocupados porque la gente quema pirotécnicos sin piedad y no toma conciencia de cuánto pueden afectar a los niños”, comentó el galeno, quien invocó a los padres de familia alejar a sus pequeños de estas prácticas pues pueden causarle la muerte.

Otro problema frecuente que presentan los menores en Navidad, agregó, son los cuadros de diarrea porque en casa no se tienen buenas prácticas de cocina o quizá hay tradiciones alimenticias que afectan el estómago de los más pequeños.

“Este fin de año queremos tener niños y niñas sanos y felices; los padres de familia deben alejarlos de los pirotécnicos y preparar comida sana y buena para que no lleguen con diarrea al hospital”, finalizó.

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Fuente: Agencia Andina

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