Silvia Lozano fue sentenciada a 20 años de prisión por el delito de violación sexual en el año 2004 contra Carlos Sang, un joven que sufre de esquizofrenia paranoide y de alteraciones mentales.

Producto de esa relación Silvia y Carlos tuvieron un hijo. La acusada alegó en su defensa que ella mantuvo una relación sentimental con la supuesta víctima de la que se habría enamorado.

Según la madre de la víctima, Belinda Gálvez (67), Silva llegó en marzo del 2004 para trabajar en la casa de la familia de Carlos durante un mes, cuando el joven estuvo internado en el hospital por su enfermedad.

El joven por su parte solo ha señalado que salieron a una discoteca y se produjo el encuentro sexual mientras su madre cree que todo fue por ambición. Sostiene que la intención de Silvia era aprovecharse de su hijo.

Silva Lozano niega haber sido empleada doméstica y asegura que su efímera relación con Carlos se inició cuando él visitaba su stand de artículos informáticos en el cetro comercial Polvos Rosados.

El abogado de Silva, Juan Alvarado, acusa a los familiares de haber manipulado la salud de Carlos durante las audiencias. “Ellos dejan de atender una semana y hacen que se vuelva medio estúpido”, dijo.