Agentes de la Policía Fiscal interceptaron un frigorífico que transportaba alrededor de 20 toneladas de carne de caballo que iba a ser distribuido en los mercados informales de Lima Norte.

Dicho camión venía de Puno y la carne de caballo no contaba con certificación de salud y al parecer no estaba apta para el consumo humano. Un agente de la policía explicó que esta carne puede provenir de mercados informales o de animales enfermos.

La carne sería distribuida en mercados informales de Los Olivos, Puente Piedra, Caquetá y La Victoria. Además sería utilizada en chifas con menús baratos.

Se detuvo al chofer del camión frigorífico, identificado como Edu Roger Ochoa, de 42 años, y fue conducido a la sede de la Policía Fiscal en Chorrillos. Los culpables de este intento de venta podrían recibir una pena de entre cuatro a ocho años por atentar contra la salud pública y por el delito de estafa en agravio del público consumidor.