Culpa a Jessica Parinango Minaya, la conviviente de su expareja, Julio César Vargas Rueda, padre de su primer hijo, de acabar con la vida de su niño de 23 semanas.

Ocurrió cuando Susan se dirigía a recoger a su hijo de tres años al colegio en Villa el Salvador y fue interceptada.

“Ella agarró por detrás y me comenzó a golpear. Le decía ‘suéltame’. Un hombre luego colocó dos bolsas en mi cabeza”, contó Vélez.

Tras forcejear, ambos le metieron a empellones a un auto, en donde un hombre y una mujer le esperaban. Le llevaron a una casa, donde, asegura Vélez, Jessica dirigió la golpiza.

“Me han pateado y tomado el pulso”, agregó la mujer agredida.

Después de tres horas de estar secuestrada, fue abandonada en un basural agonizando. Luego fue llevada al hospital María Auxiliadora.

En el 2013, Susan pidió garantías para su vida, pero nadie hizo nada. Los golpes dañaron severamente su útero, por lo que los médicos tuvieron que retirárselo y nunca más podrá concebir hijos.