No importa adónde vaya, siempre se encontrará con una obra vial que interrumpirá su camino. La última de estas es la ampliación a tres carriles del sentido norte-sur de la Costa Verde, que une Barranco con Chorrillos, la cual se inició la madrugada del martes.

Su impacto es tal que cruzar ese tramo puede tomar más de 40 minutos. Además, genera tal congestionamiento en Barranco que ha obligado al alcalde distrital, Antonio Mezarina, a pedir una reunión con las autoridades metropolitanas para conversar sobre el cambio de sentido de las avenidas San Martín, Pedro de Osma y Grau, la instalación de geomallas en el acantilado, entre otras medidas.

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Otro obstáculo es el tráfico que se genera por el cierre de la Av. 28 de Julio y de las primeras cuadras de las avenidas Arequipa y Garcilaso de la Vega en el Cercado. En el lugar se ejecutará un by-pass subterráneo. Su construcción tomará un año, informó la Municipalidad de Lima.

La Vía de Evitamiento también se ha transformado en un infierno en varios puntos, sobre todo cerca de la Av. 9 de Octubre, en San Juan de Lurigancho.

Fuente: Perú21