Para el ministro del Interior, Daniel Urresti, la cura a todos los problemas que afronta es el silencio. Por ello, anunció este lunes que no volverá a referirse a las cifras ni a los casos que lo han marcado en los últimos días y que son el sustento para que se haya planteado someterlo a una interpelación.

Sin dar las satisfacciones por presentar yeso como si fuese cocaína o confundir a un candidato con un homónimo, Urresti prefirió unilateralmente voltear la página y solo expresó que no es mentiroso.

“Jamás he mentido, les voy a suplicar que lean mis labios, nunca he mentido, no soy mentiroso”, enfatizó ante la Comisión de Defensa del Congreso.

Insistió en que las cifras que ha proporcionado sobre delincuencia son reales y están sustentadas con actas firmadas por fiscales.

Fuente: Perú21