“Mi vida ha cambiado totalmente. Un mal efectivo me ha disparado sin motivo y me ha acusado falsamente. Me ha suplantado una droga en mi bolsillo que jamás he tenido”, dijo al noticiero ‘Abre los Ojos’.

Páucar Paniora es padre de dos hijos y se encuentra esposado las 24 horas del día en una cama del hospital Cayetano Heredia. Una vez que se recupere, será recluido en un penal por robo agravado y microcomercialización de drogas.

Narró que el pasado 31 de julio fue a comprar leche y pañales en una farmacia, tras lo cual una mujer lo acusó de haberlo sido asaltada en la avenida Nicolás Dueñas. Allí fue intervenido por el alférez PNP Miguel Ángel Medina Vivanco.

“El oficial viene y me mete en un auto. Al momento de hablarme, estaba en estado etílico. Como tenía una casaca, me la sacaron y vieron que me estaba desangrando. El alférez se desapareció, me dejó abandonado en el hospital”, expresó.

Páucar Paniora reveló que le ‘sembraron’ droga, tal como se lo comunicaron agentes de la DIRINCRI. El alférez consignó en su informe en la comisaría de El Agustino que el joven tenía 15 envoltorios de papel periódico conteniendo pasta básica de cocaína y marihuana.

En tanto, la acusadora, Jessica María Mendoza Ramos, no ha dado cara a los familiares de Páucar. El padre del joven, Enrique Páucar Quispe, dejó entrever que no dice la verdad.