Un contingente de efectivos policiales, bomberos y pobladores pertenecientes a la localidad de Checacupe en la provincia cusqueña de Canchis, llegaron hasta la comunidad campesina de Suttoc, donde un incendio forestal amenazaba con reavivar sus llamas, luego de arrasar más de 20 hectáreas de terrenos de cultivo.

Pese al esfuerzo realizado por apagar el fuego que quemó sembríos de cebada, avena, habas, papas y otros, las llamas aún se mantienen vivas en distintos sectores, amenazando con continuar la destrucción.

Durante las indagaciones policiales con respecto al autor de este siniestro, se supo que se trataría de un morador del sector, quien propagó el fuego cuando se hallaba realizando labores agrícolas.