Según la revista ‘Caretas’, Quintana reunía las características del narco soplón, aquel que trafica y, a la vez, informa reservadamente a la Policía sobre el mundo de la mafia local.

Su acceso al mundo de los fierros y la farándula lo hacían el candidato ideal. Hay quienes se preguntan si Quintana no estuvo detrás de la desarticulación de la organización internacional que cayó con 622 kilos de la más alta pureza en un exclusivo condominio de La Molina el 27 de febrero pasado.

La banda tenía como empresa de fachada coincidentemente un local de lavado de autos, Máximos Superstar Carwash, ubicado en La Victoria.

“Los informantes son traficantes”, comentó un alto oficial antidrogas. “Algunos juegan su partido. No se descarta que a Quintana lo hayan ‘volteado’”. Las investigaciones policiales buscan desentrañar todos los negocios de Quintana para intentar dar con los asesinos materiales e intelectuales.

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