“Yo quería ser policía”, contó a los efectivos del orden al ser consultado sobre sus aspiraciones personales. También contó que cuando era niño, le gustaba matar pajaritos con huaraca y jebe.

“A los 14 años robé un mototaxi con dos más, pero me detuvieron al toque. A los 16 años usé un fierro largo (arma de fuego) para robar celulares”, narró. También se refirió a su padre y a su madre.

“No recuerdo la imagen de mi padre, he sido criado por mi madre, pero ella tiene otra pareja que me pegaba porque no entraba al colegio (…) Yo no iba a estudiar porque no había plata para mis hermanitos”, narró.

‘Gringasho’ se describió como un chico “normal, tranquilo, soy calculador para hacer amistades”. Según los médicos forenses, el adolescente es bastante astuto, desafiante, impulsivo e insensible al dolor humano.

Una conclusión del informe es que Gringasho “no presenta trastornos psicopatológicos o déficit cognitivo que le impidan percibir y evaluar la realidad. Impresiona con un nivel de eficiencia intelectual normal promedio”.