Según el diario ‘Trome’, el precio que le ponía a las cabezas de sus víctimas se supo tras su reciente captura, pues las investigaciones policiales determinaron que el arma incautada fue robada a un militar y se la dieron para que mate a un empresario en Chiclayo.

Él puso la tarifa, cerró el trato y ya se disponía a viajar al norte para cumplir con el encargo. Los agentes a cargo del caso informaron que la banda Los Malditos de Río Seco le dio la orden al adolescente apenas estuvo en la calle luego de fugar de Maranguita.

’Gringasho’, quien se volvió en criminal siendo aún niño, cumple una condena de seis años por matar a Ruly Ventura y al taxista Alexander Marreros (19), ambos ocurridos en el 2011 en Trujillo. También es sindicado como autor de otros seis asesinatos.

En la noche del último miércoles, el detenido solo recibió la visita de su madre, Flor Gutiérrez, procedente de la ciudad de Trujillo. Sin embargo, su enamorada, Yasmy Marquina Casas (18), no acudió a verlo, como lo tenía previsto.