Gerald Oropeza López es el dueño del lujoso Porsche que fue acribillado e incendiado el 2 de abril, en San Miguel. Este vehículo solo era una muestra de la riqueza en la que este vivía.

Pues, según informó el noticiero de América Noticias, Oropeza tenía a su nombre una mansión que antes ya estuvo en poder de José Francisco Crousillat, inmueble que perdió cuando le fue incautado por el Estado.

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Lo que llama la atención es que esta vivienda incautada por el Estado fue adquirida por este joven empresario ahora investigado por narcotráfico. Se sospecha que Oropeza fue víctima de un ataque como venganza por parte de narcos.

Pues, según detalla el informe periodístico, el procedimiento establece que este tipo de inmuebles pasan a poder de la Comisión Nacional de Bienes Incautados (Conabi).

Precisamente, una de las explicaciones que brindó Conabi sería que Oropeza Lopez, dueño de la empresa Sergero SAC, propietaria de la camioneta Porsche impactada, habría habitado de forma irregular en esta lujosa mansión valorizada en cerca de 2 millones y medio de dólares.

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