“Se pedirá más sangre (…) pero la sangre será, como en el 99.9% de los casos, del cuadrúpedo. Y los entendidos harán sus comentarios mascando el puro hasta hacerlo chorrear”, escribió el periodista César Hildebrandt en su columna Matices, en referencia a la feria del Señor de los Milagros, evento taurino realizado anualmente en la Plaza de Toros de Acho.

El hombre de prensa, fiel a su estilo, arremetió contra esta clase de eventos, en el que los toros suelen ser sacrificados frente a decenas de personas, y también a los asistentes.

“El capellán de Acho dará misa recordándonos que iglesia y sangre son una sola entidad y que para eso está también el señor de los milagros: para proteger a los palurdos vestidos de culo vistoso y chalequito”, señaló.

Dijo además que si pudiese retroceder en la historia, “preferiría que no nos hubiesen conquistado los españoles”, ya que la corrida de toros es una actividad proveniente de España.

“No faltará el marqués de no sé qué, que, en vez de cocinar cochinillos como sabe, se dedica al arte de prestarle su grafomanía a este asunto que nada tiene de arte y sí mucho de navajería”, puntualizó.

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