Los pobladores de Carabayllo no dudaron en desbaratar el auto tico donde minutos antes unos cuatro sujetos intentaron raptar a una joven del barrio.
La mujer contó que los sujetos la interceptaron cuando esta regresaba a su casa. Fue allí cuando le amenazaron con una pistola para ingresar al auto.
Este hecho fue advertido por los vecinos, quienes, en multitud, no dudaron en acudir en ayuda de la joven.
En vano fueron los intentos de la policía para persuadir la ira de las personas, quienes, en multitud, atacaron sin cesar el vehículo amarillo.
Esta indignación de los pobladores era alimentada por el rumor de supuestos secuestradores o raptores de órganos, quienes en los últimos días buscaban a niños para raptarlos y luego extraerles dichas partes de su cuerpo, que después serán vendidos en el mercado negro.
Sin embargo, cabe señalar que el Ministerio Público, la Policía Nacional y autoridades de la Salud negaron la existencia de este hecho.