La sede de la Diroes es lugar de las muchas actividades que realiza el expresidente Alberto Fujimori mientras cumple su condena por delito de lesa humanidad. Entre ellas está la creación de una serie de retratos.

Según el médico psiquiatra Martín Nizama, los cuadros “siguen la estrategia del rol de víctima asociado a un sentimiento religioso de sufrimiento, en este caso con la figura de Jesucristo, esto es bien maquiavélico”.

El programa #esnoticia tuvo acceso a una serie de recuadros pintados por el exjefe de Estado, y según el autor del libro “Analizando Fujimori”, Fujimori de por sí es un narcista, pero que “busca vender la imagen de una persona familiar y el objetivo es el sentimiento del pueblo”.