“Significa la amenaza de un grave retroceso de la libertad de pensamiento y el sistema universitario de nuestro país. Seguramente la educación universitaria no es la mejor del país, pero no pueden proponerse soluciones que empeoren su situación”, dijo.

Remarcó que está a favor de la libertad de pensamiento, de investigación, de creación de carreras, de títulos, etc. Consideró negativo que la nueva ley contenga una llamada Superintendencia de la Educación Universitaria en manos del Ministerio de Educación.

“Queda atrás la libertad de cada universidad, que en adelante estará sometido a este organismo burocrático y político”, dijo García a los periodistas.