La mayoría de accidentes de tránsito que ocurren en el país tiene su origen, por lo general, en los mismos conductores, por lo que es necesario observar determinadas pautas para evitar esas situaciones que pueden tener consecuencias trágicas.

En este contexto, Lorenzo Giordanelli, especialista en seguridad vial y director de la compañía Tracklink, planteó las siguientes recomendaciones para tener un buen estilo de manejo:

1. Evite cambiar de carril intempestivamente.

El cambio de carril intempestivo ha sido identificado por el estudio técnico de Tracklink sobre 3,790 vehículos en un año como la primera causa de accidente de tránsito. Si bien el tiempo es oro y posiblemente el tráfico de la ciudad se torne insoportable, el cambio de carril intempestivo para ganar un metro o un segundo es peligroso y genera situaciones de peligro que muchas veces desembocan en un accidente. Es recomendable respetar el espacio de conducción de otros vehículos, además de mantener la cordialidad, también evitará choques.

2. Evite las frenadas y aceleraciones bruscas.

Frenar y acelerar continuamente de manera brusca contribuye enormemente a generar caos, tráfico y accidentes de tránsito, al margen de que aumenta el consumo de combustible, de frenos y de llantas en el auto. Recordemos que un conductor responsable siempre debe tener la mirada fija en la vía para evitar accidentes, tanto para los peatones o, incluso, para su propio vehículo.

3. Mantenga una distancia prudente.

Para evitar el famoso “choque por alcance” producido cuando un vehículo va detrás del otro y en el que la distancia entre ambos es casi inexistente. Ante una frenada intempestiva del vehículo que va delante, que suele suceder muy a menudo, estar demasiado cerca del otro auto provoca un impacto inevitable. Más que brindar complicadas fórmulas de cálculo de distancia de seguridad, se recomienda mantener una distancia de seguridad para tener el espacio suficiente para frenar según la velocidad a la que se va para evitar este tipo de sucesos.

4. Observe a menudo los espejos retrovisores del auto.

Los espejos laterales y retrovisores permiten una mayor visibilidad al conductor hacia los lados y de los autos que van detrás del vehículo. Colocarlos de manera apropiada permitirá tomar las precauciones necesarias para cambiar de carril, girar en una curva, estacionar, entre otros. De esta manera se podrá prevenir potenciales situaciones de riesgo para el conductor, los otros vehículos y los peatones.

5. Maneje a la defensiva.

Pocas personas conocen el término, sin embargo no es tan malo como parece. Por manejar a la defensiva nos referimos a prepararse para los peores escenarios, pero esperando que ello no ocurra. Su concepto se basa en aplicar los buenos hábitos mencionados, sin perder de vista cómo maneja su entorno para evitar colisiones, atropellos, vuelcos y toda clase de accidentes de tránsito. Es decir, previene todas las situaciones originadas por actos inseguros de otros conductores, condiciones climáticas, entre otros.

Cabe recordar, señala el especialista, que esta situación se complica cuando algunos conductores aseguran confiadamente que su estilo de manejo es perfecto y culpan a las autoridades, a otros choferes, al clima o a las condiciones de las vías como justificación de sus actos.

Fuente: Andina

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