1. Lagarto del bosque de la Isla de Navidad: El último ejemplar murió en un zoo el 31 de mayo de 2014. Se desconoce por qué la especie desapareció de su hábitat natural, pero se cree que las especies invasoras han tenido mucho que ver.

2. Labidura herculeana: Vivía en la isla de Santa Elena y se la vio por primera vez en 1798. Las sucesivas expediciones en su búsqueda en los años 1988, 1993 y 2003 no consiguieron avistar ninguna; la última vez que se consiguió fue en 1967. La introducción de depredadores y la demanda de los coleccionistas acabaron con ella. En 2014 fue declarada oficialmente extinta.

3. Plectostoma sciaphilum: Se trataba de un caracol en el que todos sus ejemplares vivían en una colina de Malasia, pero una empresa de cemento extinguió la especie al hacer detonar la colina entera.

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4. Ajolote: Pese a que ha habido muchas noticias en el año 2014 de que se había extinguido de la naturaleza, lo cierto es que este anfibio, procedente de México, aún existe, aunque es cierto que su conservación sigue estando en un estado crítico.

5. Killifish: Dos especies de este colorido pez probablemente se han extinguido este año de la naturaleza. Se trata de Aphanius saourensis de Argelia y Aphanius farsicus de Irán. Las prácticas agrícolas han acabado con la mayor parte de sus hábitats y los peces invasores se han comido a sus crías. Afortunadamente aún quedan ejemplares en cautiverio.

6. Oso perezoso: Hubo un tiempo en el que el oso perezoso pudo extenderse libremente por el sur de Asia, pero esa época parece que ha pasado. La pérdida de su hábitat y la caza excesiva han hecho mella en sus ejemplares y se cree que han desaparecido completamente de Bangladesh.

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7. Muchas veces ocurre que hay especies que se extinguen antes incluso de haberlas llegado a conocer. En el 2014 se han incluido 13 nuevas especies a la lista de extintas. Solo el estudio de fósiles permite acercarnos a ellas. Estas son: pájaro carpintero de Bermudas, halcón de Bermudas, garza nocturna de Bermudas, lechuza norteña de Bermudas, zarapito de Navidad, pato de Finsch, rascón de Hodgen, paloma-tortuga de Mauricio, tutukiwi, loro oceánico (en la imagen), paloma azúl, tutukiwi del sur y tiqui de agua Tristán.

8. Loro del paraíso: Se extinguió sin que se tuvieran muchos datos sobre él. A principios del siglo XX su población ya estaba muy mermada y en 1927 fue la última vez que se avistó un ejemplar. Se asentaba en Australia, en el estado de Nuevo Galés del Sur y se piensa que las causas de su extinción fueron la sequía y el excesivo pastoreo en sus hábitats. Pese a que está extinto desde hace décadas, la Unión Internacional para la Conservación y los Recursos Naturales lo ha incluido en su informe anual.

9. Langosta de las Montañas Rocosas: A finales del siglo XIX se convirtieron en una plaga que ponía en riesgo todo lo que se ponía a su paso: pastos, cultivos o cualquier objeto, pero misteriosamente se extinguieron años después, de hecho la última vez que se vio una fue en 1902. La Unión Internacional para la Conservación y los Recursos Naturales lo ha incluido en su informe anual pese a extinguirse hace décadas.

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10. Hipopótamo enano de Madagascar: Se sabe que existió y que desapareció hace ya cientos de años. Poco más. Su reducido tamaño se puede explicar a través del proceso evolutivo de enanismo insular (adaptarse a los recursos en espacios reducidos). De hecho los expertos no tienen ni idea cuándo desapareció el último: en una fecha entre el “año 1.000 y la actualidad”. Ha sido incluido este año en el informe pese a extinguirse hace muchos años.

Fuente: Yahoo.es

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