Milagro. Un verdadero milagro ocurrió este miércoles en el barrio de Portoviejo, Manabí-Ecuador, una de las zonas más afectadas por el terremoto de 7.8 grados que sacudió la zona costera de ese país el sábado 16 de marzo, cuando un grupo de rescatistas halló con vida a un perrito enterrado entre los escombros.
Según informa ‘The Huffington Post’, durante el operativo de la Policía Nacional Ecuatoriana en la zona de desastre, un grupo de agentes vio y escuchó los ladridos de un perrito blanco.
Luego de mover algunas rocas y desperdicios, los agentes encontraron al can y este acabó saliendo a la superficie aunque un poco asustado.
“Lleven al perrito donde esté su dueña”, dice uno de los agentes tras el exitoso rescate.
Este nuevo milagro se suma al vivido por Pablo Córdova, el gerente de un hotel de la misma zona, que sobrevivió dos días enterrado entre los escombros bebiendo su orina.