El famoso sepelio de Osama Bin Laden en alta mar jamás se habría producido. En cambio, el cuerpo del sujeto asesinado en Abbottabad (Pakistán) por un comando especial de la Delta Force de los Marines, habría sido trasladado hasta Estados Unidos en un avión de la CIA, mientras el mundo entero creía que estaba en el fondo del mar de Arabia.

Al menos eso es lo que asegura en varios mails confidenciales el vicepresidente para Inteligencia de la CIA en la sombra (la compañía de espionaje privado Stratfor), Fred Burton, quien al principio no comparte esa información con todos los analistas de su propia empresa, sino que codifica sus mails (descubiertos por Wikileaks) con la palabra clave “[alpha]” que limita su recepción a una reducida cúpula de los que tienen máxima responsabilidad en la corporación.

“Me informan de que nos hemos traído el cadáver”

El primero de los mails de Burton, exagente especial del Servicio Secreto Diplomático del Departamento de Estado norteamericano, salta a las 05:26:15 de la mañana siguiente al solemne anuncio del presidente Barack Obama de que EEUU ha liquidado a su enemigo número uno. Bajo el escueto encabezado “OBL” (Osama bin Laden) el texto es también lacónico: “Me informan de que nos hemos traído el cadáver. Gracias a Dios”.

El siguiente envío, a las 05:51:12, da la información en el propio asunto del encabezado: “[alpha] El cuerpo va hacia Dover, Delaware, en un avión de la CIA”. Allí hay una base de la US Air Force casi a la orilla del océano Atlántico. Y en el texto del mensaje aclara: “Después seguirá hasta el Instituto de Patología de las Fuerzas Armadas en Bethesda”, junto a Washington, DC.

Bastantes horas después, a las 13:36:41, Burton coge el hilo de una conversación que están manteniendo los analistas de Stratfor, por emails cruzados con el encabezado “Cadáver de OBL”, para finalmente desvelarles que “el cuerpo va hacia Dover, debería haber llegado ya”.

Fuente: Publico.es