El Kremlin denunció hoy una ofensiva estadounidense para denigrar con acusaciones “insultantes” al presidente ruso, , a fin de influir en la campaña para las elecciones presidenciales que celebrará en 2018.

“Para las presidenciales queda mucho tiempo, más de dos años, pero (en ) a juzgar por todo, ya han empezado los preparativos. Se acumula negatividad en relación al jefe de nuestro Estado, que se emplea para influir en la futura campaña electoral”, dijo a la prensa Dmitri Peskov, portavoz de la Presidencia rusa.

Peskov, que aclaró que Vladimir Putin aún no ha decidido si se presentará a la reelección, aludía a las acusaciones de corrupción vertidas contra el presidente ruso por el subsecretario estadounidense del Tesoro para cuestiones de Terrorismo, Adam Szubin, y que fueron avaladas ayer por el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.

Según Earnest, las declaraciones de Szubin, que en un programa de televisión de la BBC dijo que Vladimir Putin encarna la corrupción, “reflejan de manera óptima la visión de la Administración” estadounidense.

“Estos insultos al jefe del Estado son absolutamente gratuitos. Si yo me hubiera permitido insultar de manera semejante al presidente de Estados Unidos (Barack Obama), me habrían despedido”, dijo Peskov.

Agregó que Putin está al corriente de las declaraciones de los altos cargos estadounidenses y las considera “absolutamente inaceptables”.

“La declaraciones de mi colega de la Casa Blanca las consideramos inaceptables, desde el punto de vista tanto de las relaciones internacionales como de las bilaterales”, dijo Peskov, que añadió que Moscú espera explicaciones de Washington.

Según el portavoz, los ataques personales a Putin obedecen a la “postura consecuente de Rusia en los asuntos sirios y ucranianos, y en general a la política activa de Moscú en los asuntos internacionales”.

“Al manifestar su rechazo a esta política activa, ciertos colegas lamentablemente pasan al terreno de la ofensa personal. Estamos convencidos de que ello no es una manifestación de fuerza. Más bien, se trata de una muestra de debilidad e impotencia”, subrayó Peskov.

Fuente: EFE