Johann Reichhart inició su trabajo de verdugo en 1924 para la República del Weimar, antes de que el führer sumiese a Alemania en el delirante proyecto expansionista de los nazis, junto a los cuales habría de trabajar, decapitando a casi 3 mil personas entre 1939 y 1945.

Este hombre de raza aria decapitó a 2 mil 876 personas, todos enemigos de Adolf Hitler o simples civiles que se resistían a la ideologia nazi.

Tras la rendición nazi el 8 de mayo de 1945, las tropas aliadas lo detuvieron y lo encerraron en la prisión de Landsberg. Poco después, sus mismos captores lo contrataron como verdugo para que ejecutara a aquellos para los cuales había trabajado anteriormente. De ese modo, hasta finales de mayo de 1946 que fue cuando acabó el contrato, Johan ejecutó a unos 156 criminales de guerra nazis.

Pese a que Johan encontró trabajo gracias a sus mismos captores, después de la guerra su esposa lo dejó y uno de sus hijos se suicidó en 1950 por culpa de su historial.

desmontando al asesino

Se dice que Johann Reichhart habría ejecutado a 32 personas en su día más sangriento, por eso era conocido como ‘El Cazador’.

Un documental que escarba sobre su vida revela que Reichhhart desarrolló su propia guillotina,similar a la francesa pero más ligera y móvil.

“Él estaba muy orgulloso de lo que hizo. Él sentía que estaba haciendo un servicio importante. Una de las razones por las que terminó trabajando para los aliados era que no había mucha gente preparada para hacer ese tipo de cosas”, dicen los presentadores del material televisivo.

Luego de muchos años viviendo solo, Reichhart murió en una residencia cerca de Munich en 1972.

no dejes de ver

Mujer rusa se arroja de un edificio en llamas durante incendio