La mayoría parlamentaria chavista aprobó el desafuero de la diputada opositora María Mercedes Araguren para que sea investigada por presunta corrupción. La oposición denunció que la sanción busca dar al presidente Nicolás Maduro los votos requeridos para obtener superpoderes.

“Aprobado el allanamiento de la inmunidad parlamentaria de la diputa María Mercedes Aranguren”, dijo el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, luego de que la mayoría votara a favor del desafuero. Inmediatamente después, la legisladora abandonó el plenario.

Al Gobierno le falta solo un voto para alcanzar los tres quintos de la Asamblea Nacional, 99, que requiere la Constitución para aprobar la llamada Ley Habilitante, que permitirá a Maduro gobernar por decreto durante un año.

El escaño de Aranguren, elegida en 2010 por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y quien dos años después se pasó a la oposición, será asumido por su suplente Carlos Flores, considerado chavista por el oficialismo.

En cinco minutos que tuvo durante la sesión para defenderse, la diputada afirmó que “son falsas” las acusaciones en su contra y estimó que “obviamente esto es una retaliación política”.