Después de la elección del argentino Jorge Mario Bergoglio como nuevo pontífice de la Santa Sede, la historia del Vaticano vuelve a dar un vuelco.

Francisco I, el nombre adoptado por el nuevo papa, es el primero en ocupar el sillón de Pedro procedente del continente con mayor número de fieles: Latinoamérica.

A continuación, el listado de los últimos diez papas que lo precedieron, desde 1878:

1. Benedicto XVI (2005-2013) Joseph Ratzinger: originario de Baviera, de una familia modesta, y devoto antinazi durante el Concilio Vaticano II, fue el primer papa en 700 años que decidió renunciar por problemas de salud. Durante su mandato como Sumo Pontífice siguió la labor de su predecesor, con especial énfasis en la purificación de la iglesia. Su pontificado se caracterizó por una serie de escándalos y diversos errores de comunicación.

2. Juan Pablo II (1978-2005) Karol Wojtyla: Es el primer Papa polaco de la historia. Conservador en la doctrina y opositor tanto al comunismo como al capitalismo. En 1981 fue herido de gravedad en un atentado en la Plaza de San Pedro. Se caracterizó por su carisma y energía, y por su gran popularidad entre los jóvenes, para los que creó la “Jornada Mundial de la Juventud”.

3. Juan Pablo I (1978) Albino Luciani: Patriarca de Venecia, tiene uno de los papados más cortas de la historia. 33 días. Su estilo directo y sencillez desarmante lo mantuvieron aislado de la Curia. Murió prematuramente, aquejado por problemas de salud.

4. Pablo VI (1963-1978) Giovanni Battista Montini: Brazo derecho del Papa Pío XII, fue elegido en pleno Concilio Vaticano II. Criticado por su encíclica ‘Humanae Vitae’ (1968) que decía no a la anticoncepción, fue malinterpretado a menudo al final de su pontificado.

5. Juan XXIII (1958-1963) Angelo Roncalli: De origen humilde, se convirtió en el hombre de la apertura de la Iglesia al mundo, y puso en marcha el Segundo Concilio Vaticano en 1962. Publicó la famosa encíclica ‘Pacem in Terris’ poco antes de su muerte. En Italia se lo llamó ‘el Papá bueno’, y fue muy popular por su buen carácter.

6. Pío XII (1939-1958) Eugenio Pacelli: De perfil aristocrático, diplomático de carrera que sirvió a la Santa Sede en Munich y Berlín, vivió durante su papado una época trágica.

Había sido brazo derecho del Papa Pío XI en toda relación tumultuosa con el III Reich y el Estado fascista italiano, y fue acusado de no haber hecho lo suficiente contra el Holocausto, y de no haber hablado abiertamente de la persecución en curso, quizá por temor a las represalias a los católicos alemanes y polacos. Sus defensores señalan que muchos judíos italianos se salvaron escondiéndose en conventos.

7. Pío XI (1922-1939) Achille Rati: Resolvió la vieja “cuestión romana”. Fue bajo su mandato cuando nació el Estado Vaticano, con motivo de la firma de los Acuerdos de Letrán con Mussolini, en 1929. Alpinista, solitario, serio, fue el primer Papa en nombrar obispos chinos y estuvo particularmente interesado en las misiones. Condenó al nazismo y al antisemitismo. Se ausentó a propósito del Vaticano cuando Hitler visitó a su aliado Mussolini en Roma.

8. Benedicto XV (1914-1922) Giacomo della Chiesa: de una familia de la aristocracia genovesa, se centró en aplacar una violenta “crisis modernista” en la Iglesia. Canonizó a Juana de Arco. Fue amado especialmente por los franceses y los alemanes, por trabajar sin descanso para detener la carnicería de la Primera Guerra Mundial. En 1917, lanzó un llamamiento a los beligerantes. El propio Benedicto XVI dijo que eligió su nombre en honor a este “Papa de la paz”.

9. Pío X (1903-1914) Giuseppe Sarto Melchior: Canonizado por el Papa Pío XII en 1954 por su piedad, su proximidad a los fieles y su lenguaje sencillo, este antiguo párroco de origen modesto fue profundamente conservador. Condenó las tesis modernistas dentro de la Iglesia y sin embargo, apoyó la reforma del Código de Derecho Canónico y la de la Curia romana, y se posicionó firmemente en contra de la esclavitud.

10. Léon XIII (1878-1903) Gioacchino Pecci: Este papa, un refinado humanista que escribía poemas en latín, fue conocido por su encíclica social ‘Rerum Novarum’, en donde se refiere específicamente a la situación de los trabajadores y recomienda la colaboración entre el capital y el trabajo y las asociaciones de trabajadores. Criticó el liberalismo, al tiempo que rechazó el socialismo y la lucha de clases.

Fuente: Infobae