Facebook y Skype ayudan a mujer alérgica a todo, incluso a esposo

Hace 4 años Johanna Watkins llevaba una vida normal. Tenía un trabajo y estaba conociendo el mundo de los casados, pero esa rutina cambió cuando empezó a sentirse mal por todo, incluso por los besos y abrazos que le daba su esposo Scott, con quien sigue unida gracias a Facebook y Skype.

Luego de varios análisis, los Watkins descubrieron que Johanna era alérgica a todo, no solo a productos o sustancias químicas, sino a la sola presencia de Scott. Esta estadounidense de 29 años padece el Síndrome de Activación Mastocitaria, una enfermedad inmunológica reconocida por primera vez en 2007.

En los pacientes que sufren esta condición, el organismo produce un exceso de sustancias químicas responsables de controlar las reacciones alérgicas. Esto se traduce en problemas para respirar que pueden provocar un paro cardíaco.

La mayoría de los pacientes similares a los de Johanna son leves y se pueden controlar con medicación dando como resultado una vida normal, pero este no es el caso, tal es así que la única forma de estar bien es aislándose en una habitación de la que nunca sale.

Las únicas personas que ingresan a la habitación de Johanna son sus hermanos, porque ni Scott puede hacerlo. Antes de entrar, ellos deben evitar ingerir ciertos alimentos, higienizarse con un jabón sin perfume y vestirse una vez que están dentro del cuarto con ropa que nunca ha salido de allí.

“Hace tres o cuatro años, cuando me acercaba mucho a mi esposa, específicamente cuando mi rostro estaba cerca del suyo, ella empezaba a toser. Pasaba cada vez que trataba de abrazarla o besarla”, dijo el esposo a la BBC.

Desde que él empezó a ser nocivo para ella no se ven, solo se comunican por Skype o Facebook.

Scott continúa ocupándose de todo lo que puede hacerle a su esposa la vida más llevadera y solo le cocina dos platos que puede tolerar: cordero con pepinos y carne con zanahorias y apio.