De terror. Como una forma de llamar la atención y crear conciencia entre la población para el cuidado del medio ambiente, el biólogo y artista Brandon Ballengee hizo públicas imágenes de los terribles estragos que dejan la contaminación y el arrojo de desechos químicos.

Ballengee utilizó como instrumento principal de su muestra las terribles mutaciones que sufrieron varias ranas. Algunas de ellas no tienen patas o poseen más de cuatro.

Según explicó a Dailymail, las sustancias químicas arrojadas a los lagos hacen que las ranas sean más susceptibles a la invasión de parásitos violentos en sus ecosistemas perfectamente equilibrados.

“Estas anomalías son causadas ​por lesiones abusivas o infecciones parasitarias que se desarrollan cuando las ranas son renacuajos. (…) Los depredadores y parásitos son naturales, pero la degradación del medio ambiente parece estar aumentando las mutaciones”, indicó.

La muestra de Ballengee, conocida como Malamp, está expuesta en el Museo Het Domein en Sittard, Países Bajos.