“Hay heridos menores que han ido al hospital y que también han sido atendidos en los centros de albergue”, explicó el burgomaestre Salvador Urrutia, quien añadió que algunas casas de adobe se cayeron por el fuerte temblor, que sin embargo no causó daño a los edificios de altura.

El terremoto de 8,2 grados de magnitud se registró este martes en el extremo norte del país y generó un tsunami que disparó las alarmas en toda la costa de Chile, así como en Perú, Ecuador, Colombia y América Central.

El movimiento telúrico, que afectó principalmente a las regiones norteñas de Arica y Parinacota, se registró a las 20:46 hora local, (23.46 GMT) con epicentro en el mar, a 89 kilómetros al suroeste de Cuya, frente a la costa de Tarapacá, según informó el Centro Sismológico Nacional.

Como consecuencia del tsunami provocado por el terremoto, que ya ha generado olas de 1,8 metros de altura, las autoridades han ordenado la evacuación de toda la población que vive en el borde costero, de 5.300 kilómetros de largo

“Ya ha evacuado una gran cantidad de gente, que se ha ido mucho más lejos de la zona de seguridad, a 50, 60 y hasta 70 metros de altura”, explicó el alcalde de Arica, quien señaló ya están funcionado albergues para las personas que han abandonado sus casas y no tienen donde pasar la noche.

Salvador Urrutia señaló que a pesar del fuerte temblor, en general hay tranquilidad y agregó que el aeropuerto de Arica está operativo, no así el de la vecina ciudad de Iquque, debido a que registró una falla en la torre de control.

En Arica, ciudad situada en la frontera con Perú, el servicio de agua potable funciona sin problema, pero a estas horas permanece a oscuras y tampoco es posible la comunicación mediante telefonía celular.

Fuente: EFE