Brasil está en el centro de atención en todo el mundo. Ahora, las miradas hacia ese país ya no son solo por ser la sede del Mundial que está a pocos días de iniciar.

Sino que, además, para arreglar las locaciones que albergarán a la gran fiesta del fútbol, se desaloja violentamente varios inmuebles y se hace la ‘vista gorda’ ante la creciente prostitución infantil que azota ese país. Así lo denunció el portal web Iniciativa Debate.

Ahora, según informa el diario El Mostrador de Colombia, se espera que la prostitución aumente a medida que se acerca la Copa Mundial de la FIFA en 2014. Especialmente, la prostitución infantil.

“Si bien es legal a partir de los 14 años, hay muchas niñas menores vendiendo sexo. Según la UNICEF, son alrededor de 250 mil”, informó el diario colombiano.

Los testimonios de una drámatica realidad que no debe existir

“A los clientes se les cobra alrededor de 60 dólares. La prostituta obtiene la mitad de eso, menos las deudas por vestimenta, drogas, alcohol y cosméticos. La niña consigue un cuarto con lo que paga el cliente”, aseguró Thiago a Corriendolavoz.com.

“Soy feliz siendo prostituta” es el título de la campaña que el Gobierno brasileño lanzó en junio para defender la legalidad de esta práctica y que canceló ante las fuertes críticas que recibió.