En 2013 la compañía Emoya Luxury Hotel inauguró en Sudáfrica un hotel para los millonarios de todo el mundo que tiene como principal característica imitar las estructuras y casas edificadas en las zonas más pobres de ese país.

Así, este “exclusivo” lugar combina el ambiente de los suburbios sudafricanos con el confort de Europa Occidental.

En total, el hotel consta de 12 casas, cada una de las cuales cuenta con 4 camas. El alquiler de una casa entera cuesta 850 randes sudafricanos (unos 80 dólares) por noche. El desayuno asciende a 110 randes (unos 10 dólares) por persona.

Cada casa cuenta con cuatro camas, electrodomésticos y sanitarios al estilo de los años 80. En las cocinas hay hervidoras eléctricas, una radio y un horno con dos hornillos.

Los baños están en la calle, pero las casas cuentan con ducha de agua fría y caliente, velas, lámparas de kerosene, suelos con calefacción y Wi-Fi de banda ancha. Entre las instalacionas también hay un salón spa.

Después de su aparición, Shanty Hotel fue muy criticado en los medios de comunicación. En primer lugar, se decía que 850 randes era una tercera parte del salario medio en Sudáfrica. También fue criticada la misma idea de valerse de los barrios bajos, que simbolizan la pobreza para una gran parte de la población sudafricana, para ganar dinero.

Pese a las críticas, la administración del hotel asegura que las habitaciones están llenas todos los días al 65%.

Fuente: RT