La huelga iniciada por el equipo encargado de enterrar a las víctimas del virus del Ébola en la capital de Sierra Leona, por no haber cobrado el salario de la última semana, amenaza con dejar los cadáveres abandonados en las casas y calles de Freetown.

Los enterradores que se declararon el huelga el martes son los que dependen del Gobierno sierraleonense, mientras que los equipos de la Cruz Roja que colaboran con el Ministerio de Salud han mantenido su labor en la ciudad, informó la radio estatal de Sierra Leona.

Los paros han comenzado tras la detección de más de 200 nuevos casos de ébola, tras concluir el encierro de tres días que el Gobierno de Sierra Leona decretó para evitar la expansión del virus.

Una ama de casa de 40 años y madre de cuatro niños, Mariama Bangura, que ha permanecido confinada en su casa los últimos tres días, dijo en entrevista telefónica que la decisión del equipo de enterradores de Freetown es “imperdonable” en estos momentos.

Bangura añadió que el rechazo a recoger los cadáveres conllevará riesgos médicos para el resto de ciudadanos, y se mostró esperanzada en que el Gobierno de Ernest Bai Koroma actúe rápidamente para resolver la situación.

Fuente: EFE