Una tortuga africana evadió la muerte y se salvó de ser triturada por los filudos dientes de un enorme cocodrilo gracias a lo resbaladizo de su caparazón. ¿Cómo así?

Mario Moreno, fotógrafo aficionado, que paseaba con una lancha por las aguas de la Reserva Kruger en Sudáfrica, captó el enfrentamiento y dijo que el pequeño animal se salvó de milagro. “Nada tenía que ver la dureza de su caparazón”, precisó.

Moreno contó a Dailymail, que el cocodrilo embistió a la tortuga y la lanzó por los aires para tragársela entera, pero calculó mal y esta no cayó en su boca.

Segundos después la volvió a atacar con un mordisco pero sus dientes resbalaron por su caparazón. Finalmente la tortuga aprovechó ese instante para huir.

“La escena era increíble. Por un lado el cocodrilo yéndose frustrado en busca de otra presa; y por el otro, la tortuga descansando sobre una piedra como si nada hubiera pasado”, refirió.