¿Cómo hizo Rusia para atrapar al asesino serial más sanguinario de su historia?

Mijaíl Popkov comenzó a violar y matar mujeres jóvenes en 1992 y no fue detenido hasta 2012 por la policía. Durante esos años asesinó a 84 mujeres y ahora tendrá que enfrentar a la justicia de Rusia. Cuando le preguntaron por qué se dedicó a matar, dio una respuesta escalofriante.

Atrapar a Mijaíl Popkov, conocido como ‘El Limpiador’, le costó a las autoridades rusas 20 años, en los que persiguieron pistas falsas e hicieron miles de hipótesis. Él logró burlar a la justicia por sus conocimientos en investigación criminal, pues era policía.

el asesino ruso

Los excompañeros de trabajo recuerdan a Popkov como un hombre familiar y de gran simpatía: una característica por la que se ganó el apodo de “El sonrisa”. Él y su esposa Elena parecían una familia perfecta, pero ella era infiel.

Esa traición marcó su vida y aunque no la asesinó porque quería que su hija tuviera una familia completa, se dedicó a “limpiar” la ciudad de “mujeres depravadas” que intentaban engañar a sus maridos.

Cuando Popkov veía a mujeres en estado de embriaguez haciendo autostop, paraba su coche y se ofrecía a llevarlas hasta casa. Por el camino les proponía “seguir la fiesta en otro sitio”. Si las chicas se negaban, las dejaba en sus casas, pero si aceptaban, las violaba y acababa con sus vidas con crueldad, usando un cuchillo, un hacha o un destornillador, con lo que tuviera a mano.

investigaciones y cárcel

Dos pistas llevaron a los investigadores hasta el asesino: las marcas de neumáticos de su coche en los lugares de los crímenes y el análisis de las muestras de ADN de 3.500 sospechosos, que proporcionó la prueba definitiva.

Popkov fue detenido en junio de 2012 en un tren camino a la ciudad rusa de Vladivostok. El expolicía confesó solo algunos de los asesinatos, pero en 2015 admitió plenamente su culpabilidad ante el tribunal, tras lo cual fue condenado a cadena perpetua.

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