Apenas pasaban las 7 de la mañana en el puente Sheppey Crossing cuando, en un contexto de visibilidad reducida, un vehículo se incrustó sobre otro que frenó de golpe.

Entonces comenzó una impresionante reacción en cadena, que según testigos duró casi 10 minutos, y que terminó apilando a más de 100 automóviles y camiones.

La larga fila de vehículos estrellados, con cientos de personas caminando entre ellos y las ambulancias que acudían sin cesar, todo cubierto por la densa niebla, terminaba de dar forma a una escena que parecía salida de una película.

“Es terrible. Nunca había visto algo así en mi vida. Sólo podía escuchar las colisiones”, contó Martin Stammers en diálogo con Kent Online. Fue uno de los conductores que protagonizó el accidente.

Fuente: Infobae.com