El Aeropuerto de Birmingham (Reino Unido) es uno de los más odiados por los pilotos de todo el mundo, debido a los fuertes vientos que lo surcan, lo que complica su trabajo.

Recientemente fueron publicados varios videos con aterrizajes extremos ocurridos entre los últimos días de 2014 y los primeros de 2015.

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Se ubica a 8,8 kilómetros de la ciudad, que pertenece a la región de West Midlands, en el centro oeste de Inglaterra. Al ser la segunda ciudad más poblada del país, su aeropuerto es uno de los más concurridos.

En él hacen base aerolíneas como Flybe, Monarch Airlines, Ryanair, Thomas Cook UK y Thomson Airways, que viajan a destinos de toda Europa e inclusive hacia otros continentes. Por él circulan unos 10 millones de pasajeros al año.

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Toda la región está afectada por fuertes vientos que complican considerablemente las maniobras de aterrizaje. Principalmente durante el invierno, entre diciembre y febrero, cuando las condiciones meteorológicas recrudecen.

Ningún avión está exento de problemas los días más ventosos. Todos tienen dificultades para aterrizar.

Fuente: Infobae.com

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