Un “default” supone, en esencia, una suspensión de pagos. Una entidad no dispone de liquidez suficiente para hacer frente al pago de la deuda que ha contraído con sus acreedores. En este caso la entidad es un país (Argentina) y sus acreedores son los conocidos como “fondos buitres”.

Si el citado país no consiguiese pagar su deuda a tiempo, esto le impediría poder seguir colocando sus bonos en el mercado internacional. Federico Etchelecu, experto financiero de la banca española, explica que un país tiene tres vías de financiación. Al ser los bonos una de las opciones, las únicas dos restantes son la devaluación del ya demacrado peso argentino o la emisión de nuevos billetes.

¿Cómo afecta esta situación al país sudamericano?

Según José Ramón Pin Arboledas, profesor del IESE Business School, la turbulencia financiera pondría el dólar paralelo por las nubes. Los argentinos seguirían guardando sus ahorros fuera del país y nadie otorgará créditos a su Estado.

De acuerdo de abc.es, los mercados argentinos no parecen haberse enterado del estado delicado en el que se encuentra el país en estos momentos. El peso solo se ha devaluado ligeramente y la Bolsa argentino incluso cerró en números positivos la pasada jornada.

Fuente: abc.es