Los cristianos que fueron expulsados de sus casas por el grupo terrorista Estado Islámico fueron sorprendidos, a pocas horas de celebrarse la Navidad , por el Papa Francisco con un mensaje colmado de esperanza a través de una llamada telefónica vía satélite.

“En mi corazón están (…) los niños inocentes, los niños muertos y los explotados. Pensemos en esos niños mientras Jesús viene a nuestra casa. Yo pienso también en los abuelos, en los ancianos que ya han atravesado la vida y ahora sufren esa cruz”, dijo por teléfono a los refugiados.

“Hermanos, estoy cerca de ustedes, de todo corazón. Dios los acaricia con su ternura”, dijo según la agencia de prensa italiana AGI.

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El lunes, el sumo pontífice dirigió una larga carta a los cristianos de Oriente, exhortándolos a “perseverar” a pesar de las dificultades.

Fuente: Infobae.