El nivel “razonable” de estas partículas es una media anual de hasta 10 microgramos por metro cúbico. Si la presencia es mayor se puede considerar que existe contaminación perjudicial para la salud y si es menor, que el aire es limpio.

Es decir, se considera que Salvador de Bahía es la que tiene el aire más limpio porque la media anual indicó que “sólo” estaban suspendidos en el aire 9 microgramos de PM 2,5 por metro cúbico.

Ibarra, en Ecuador, se sitúa en segunda posición porque también relevó 9 microgramos de PM 2,5 pero contabilizó 18 microgramos de PM 10, mientras que en Salvador el nivel de PM 10 fue de 17.

Las PM 10 son unas partículas contaminantes que también están suspendidas en el aire pero son un poco mayores que las PM 2,5 y por tanto son menos perjudiciales.

Por otra parte, la ciudad donde se detectaron los peores índices fue la capital peruana. En general en la región, las ciudades donde se respira peor son: Rencagua (54 microgramos de PM 2,5) y Chillán (53) en Chile; Santa Gertrudes, en Brasil (44); y Cochabamba, en Bolivia (41).