En la ciudad de Washington, Estados Unidos, una pareja de novios inyectaba heroína a sus pequeños hijos para hacerles dormir más rápido. Además, ellos vivían en deplorables condiciones: entre excremento de ratas y agujas usadas.

Ashlee Hutt (24) fue acusada por drogar con heroína a sus tres hijos, de 6, 4 y 2 años. Ella decía que les inyectaba “jugo para dormir” y “medicina para sentirse bien”.

Además, ella, los pequeños y su novio Leeroy McIver (26) vivían en una casa en pésimas condiciones, la cual fue intervenida el año pasado ante la denuncia de vecinos.

Los Servicios Sociales encontraron a los niños no solo sucios y con algunas heridas, sino también con huellas de inyecciones. Tras los exámenes correspondientes, se comprobó que los niños sí habían sido drogados con heroína.

El hijo mayor dijo en uno de sus testimonios que fue inyectado con la droga luego de que su padre le ahorcara por un largo rato.

Los padres fueron detenidos en noviembre de 2015 y admitieron ser adictos a la droga. En tanto, actualmente los tres menores se encuentran en albergues infantiles y con buena salud.

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