Hugo Chávez murió el 5 de marzo de 2013 y Nicolás Maduro encabezó la cadena nacional que comunicó el fallecimiento. Desde octubre de 2012, cuando el bolivariano ganó un nuevo mandato presidencial, hasta el día de su muerte, todos los órganos del Estado aseguraban que retornaría sano al poder.

El discurso optimista del chavismo se desmoronó rápidamente con la ausencia de información, imágenes o videos que confirmaran su estado de salud. Maduro, por primera vez, admitió que Chávez sabía que iba a morir. Sabía que no superaría la cuarta intervención en Cuba. “El día en que se enteró de esta cuarta operación, habló con los médicos; intuía que era el final”, confesó.

En una entrevista con el medio oficialista El Viejo Topo, narró con tono épico los últimos días de Chávez. “Pensamos que era un problema muscular, otras cosas se pensaron, hasta que llegó el momento del examen. Lamentablemente, después se comprobó que era un tumor canceroso muy grande, muy agresivo”, indicó.

Maduro indicó que en sus dos últimos años de vida, Chávez estuvo seriamente afectado por las operaciones, los dolores, los tratamientos.

“Él nunca falló en su intuición. A todas las operaciones anteriores fue con espíritu de victoria y seguro de salir bien. El día en que se enteró de esta cuarta operación, habló con los médicos; intuía que era el final”, refirió.

“Fui para allá (a Cuba) el 5 de diciembre. Llegué sobre las 8 de la noche y estuve con él hasta las cinco o las seis de la mañana del 6, y él conversó largamente. Hasta el último segundo de ese día tuvimos la esperanza de que él superaría esas circunstancias”,finalizó.

Fuente: Infobae.com